
diciembre pasado, sentados en el comedor de Edi mi hermano y yo platicábamos con ella, la veíamos dar vueltas de la cocina al fregadero, regresar al comedor mientras cantaba y chiflaba con esa carita de travesura que mi mamá heredó... pedí con todas mis fuerzas que ese recuerdo no se me borrará, que llegará en el momento preciso, hoy, vi a mi abuela chiflando y sonriendo como cada mañana....
donde quiera que estés estamos juntas, vibrando donde las distancias y los cuerpos no existen. Siempre en luz, siempre en amor. Te amo mi chula.
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